Europa sufre una ola de calor 'excepcional' con temperaturas que superan los 42 ºC

La ola de calor que afecta a Francia se originó en España, donde lleva más de nueve días azotando al país.

Bruselas.– Gran parte de Europa enfrenta una ola de calor "excepcional" que ha llevado los termómetros por encima de los 42 grados Celsius en países como Francia, Portugal, España y los Balcanes, generando alertas rojas, riesgo extremo de incendios y estados de emergencia.

En Francia, el sur y el centro del país están bajo alerta roja por las temperaturas extremas. El servicio meteorológico Météo France advirtió que el fenómeno será “muy intenso, incluso excepcional” en 12 departamentos, donde se espera que las máximas superen regularmente los 40 grados y, en algunos casos, los 42 ºC, con posibilidad de romper récords históricos.

España y Portugal: al borde del colapso por calor extremo

La ola de calor que afecta a Francia se originó en España, donde lleva más de nueve días azotando al país.

La Agencia Española de Meteorología (Aemet) advirtió que las temperaturas más extremas se registrarían este lunes, especialmente en Baleares, Canarias, País Vasco y Navarra, con valores que superarían también los 42 ºC. La situación no mejoraría hasta al menos el miércoles 13 de agosto.

En Portugal, las temperaturas alcanzaron este lunes los 43 ºC, con 12 de los 18 distritos en aviso naranja por calor y el resto en nivel amarillo. El país permanece en estado de alerta por incendios y temperaturas extremas, vigente hasta el miércoles, mientras continúa la lucha contra varios focos de fuego activos.

Gran parte de Europa enfrenta una ola de calor "excepcional" que ha llevado los termómetros por encima de los 42 grados Celsius en países como Francia, Portugal, España y los Balcanes, generando alertas rojas, riesgo extremo de incendios y estados de emergencia.

En Francia, el sur y el centro del país están bajo alerta roja por las temperaturas extremas. El servicio meteorológico Météo France advirtió que el fenómeno será “muy intenso, incluso excepcional” en 12 departamentos, donde se espera que las máximas superen regularmente los 40 grados y, en algunos casos, los 42 ºC, con posibilidad de romper récords históricos.

España y Portugal: al borde del colapso por calor extremo
La ola de calor que afecta a Francia se originó en España, donde lleva más de nueve días azotando al país. La Agencia Española de Meteorología (Aemet) advirtió que las temperaturas más extremas se registrarían este lunes, especialmente en Baleares, Canarias, País Vasco y Navarra, con valores que superarían también los 42 ºC. La situación no mejoraría hasta al menos el miércoles 13 de agosto.

En Portugal, las temperaturas alcanzaron este lunes los 43 ºC, con 12 de los 18 distritos en aviso naranja por calor y el resto en nivel amarillo. El país permanece en estado de alerta por incendios y temperaturas extremas, vigente hasta el miércoles, mientras continúa la lucha contra varios focos de fuego activos.

El calor avanza por Europa: Reino Unido, Suiza, Italia y los Balcanes
Otros países europeos también han sido golpeados por esta ola de calor:

En el Reino Unido, se registra la cuarta ola de calor del verano, con máximas que superarán los 30 ºC, especialmente en Inglaterra y Gales, donde se esperan hasta 33 ºC y posibles tormentas eléctricas.

Suiza enfrenta temperaturas de 34 a 37 ºC en Ginebra y de 31 a 34 ºC en otras regiones.

En Italia, se prevé que el calor supere los 40 ºC en varias zonas hasta el fin de semana. Esta es ya la cuarta ola del verano italiano, impulsada por un anticiclón norteafricano.

En los Balcanes, países como Macedonia del Norte, Serbia, Croacia, Rumanía y Albania registran temperaturas entre los 39 y 41 ºC, con alertas por incendios, fuertes vientos y asistencia internacional para combatir las llamas en zonas forestales.

Los expertos consideran este episodio como uno de los más intensos de los últimos años, atribuido al avance del cambio climático y al aumento de fenómenos meteorológicos extremos que afectan al continente europeo con mayor frecuencia.

Otros países europeos también han sido golpeados por esta ola de calor:

  • En el Reino Unido, se registra la cuarta ola de calor del verano, con máximas que superarán los 30 ºC, especialmente en Inglaterra y Gales, donde se esperan hasta 33 ºC y posibles tormentas eléctricas.

    Suiza enfrenta temperaturas de 34 a 37 ºC en Ginebra y de 31 a 34 ºC en otras regiones.

    En Italia, se prevé que el calor supere los 40 ºC en varias zonas hasta el fin de semana. Esta es ya la cuarta ola del verano italiano, impulsada por un anticiclón norteafricano.

    En los Balcanes, países como Macedonia del Norte, Serbia, Croacia, Rumanía y Albania registran temperaturas entre los 39 y 41 ºC, con alertas por incendios, fuertes vientos y asistencia internacional para combatir las llamas en zonas forestales.

Los expertos consideran este episodio como uno de los más intensos de los últimos años, atribuido al avance del cambio climático y al aumento de fenómenos meteorológicos extremos que afectan al continente europeo con mayor frecuencia.

Además de los impactos térmicos, esta ola de calor ha generado una alta preocupación en sectores agrícolas y energéticos de los países afectados.

La exposición prolongada a estas temperaturas extremas pone en riesgo cultivos, ganado y el suministro eléctrico, especialmente en zonas rurales donde las infraestructuras no están diseñadas para soportar olas de calor tan prolongadas.

En ciudades densamente pobladas, el calor también ha agravado problemas de salud pública, con aumentos en los casos de golpes de calor, deshidratación y complicaciones respiratorias, sobre todo entre personas mayores y niños.

Las autoridades europeas han instado a la población a evitar actividades al aire libre en horas centrales del día, hidratarse constantemente y seguir las recomendaciones sanitarias.

Asimismo, se han desplegado refugios climatizados en varios municipios y se mantiene un monitoreo constante de los focos de incendio, especialmente en zonas boscosas.

Meteorólogos y expertos en cambio climático coinciden en que este tipo de eventos extremos se están volviendo más frecuentes e intensos, por lo que la planificación urbana, la adaptación climática y la reducción de emisiones se vuelven cada vez más urgentes.