La actriz Kelly Mack, conocida por su papel en The Walking Dead, falleció tras luchar contra un glioma. Su familia confirmó su muerte el 2 de agosto, rodeada de seres queridos.
LOS ÁNGELES.– Kelly Mack, quien encarnó a Addy en la novena temporada de The Walking Dead, falleció el sábado 2 de agosto de 2025 a los 33 años, víctima de un agresivo glioma del sistema nervioso central.
La triste noticia fue compartida el martes 5 de agosto por su hermana Kathryn en Instagram. En un mensaje conmovedor, expresó:
“Una luz brillante se ha apagado, pero su resplandor perdurará en nuestras memorias.” Mack murió en paz, acompañada por su madre, Kristen, y su tía, Karen.
Desde inicios del año, Mack dio a conocer en redes su proceso de tratamiento, que incluyó radioterapia de protones. A pesar de lo difícil del camino, mantuvo una actitud esperanzadora y agradecida con el apoyo de quienes la rodeaban.
Su hermana la describió como una “verdadera guerrera, llena de dignidad”, orgullosa de su coraje y serenidad durante la enfermedad.
Además de su rol en The Walking Dead, Mack apareció en episodios de Chicago Med (temporada 8) como Penelope Jacobs, y en 9‑1‑1 en el 2019.
Más recientemente participó en la película Universal, junto a Joe Thomas y Rosa Robson. El director Michael E. Satrazemis, que trabajó con ella en la serie zombi, la recordó diciendo que ella irradiaba luz en cada escena. Numerosos colegas le han enviado mensajes emotivos, resaltando su profesionalismo y su calidad humana.
La familia ha planeado un servicio memorial en Ohio, su estado natal, para el sábado 16 de agosto. En los próximos días se anunciará una ceremonia en Los Ángeles, donde será homenajeada por la industria del entretenimiento.
El legado de Kelley Mack trasciende la pantalla. Su valentía al enfrentar la enfermedad, su honestidad con sus seguidores y su compromiso con el arte la convierten en una figura admirada más allá de sus actuaciones.
Hoy, sus colegas, fans y seres queridos la recuerdan no solo por sus personajes, sino por la humanidad con la que vivió cada etapa de su vida. Su luz sigue viva en cada historia que ayudó a contar.