Durante los primeros días de agosto, agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), en coordinación con el Ministerio Público, realizaron 66 allanamientos y múltiples intervenciones en distintos puntos del territorio nacional.
Como parte de estos operativos conjuntos, se decomisaron 104,010 gramos de cocaína, 33,099 de marihuana, 4,333 de crack, 257 gramos de hachís, 155 de tusi, 7.40 de metanfetaminas y 70 pastillas de éxtasis, totalizando 141,863 gramos de diversas sustancias prohibidas.
Armas, vehículos y equipos incautados
Además de los narcóticos, las fuerzas de seguridad ocuparon cinco armas de fuego, 21 cuchillos, 43 motocicletas, 247 teléfonos celulares, 50 radios de comunicación, dos chalecos antibalas, 106 balanzas, seis tragamonedas, así como tijeras, envases, fardos de fundas y dinero en pesos y dólares, todos presuntamente utilizados para la distribución y procesamiento de drogas.
Redoblan la ofensiva a nivel nacional
Según informaron las autoridades, esta nueva arremetida forma parte de una estrategia conjunta para desmantelar redes de microtráfico en barrios y provincias del país. Los detenidos fueron entregados al Ministerio Público, que les conocerá medidas de coerción en las próximas horas por violación a la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas.
En lo que va de año, los operativos han permitido la incautación de más de seis millones de gramos de sustancias ilícitas, incluyendo cocaína, heroína, marihuana, crack, éxtasis, tusi y metanfetaminas.
Las autoridades aseguraron que las operaciones continuarán en todo el territorio nacional, con el objetivo de seguir llevando seguridad y tranquilidad a la población dominicana.
Durante los últimos meses, el país ha enfrentado un preocupante aumento en los casos de microtráfico, con la proliferación de puntos de venta de drogas en barrios urbanos y comunidades rurales. Esta situación no solo ha intensificado la violencia en ciertas zonas, sino que también ha generado un clima de inseguridad que afecta directamente a las familias. Ante este panorama, las autoridades han redoblado sus esfuerzos para frenar el avance de las redes delictivas vinculadas al narcotráfico local, lo que ha derivado en operativos cada vez más amplios y contundentes en todo el territorio nacional.