EE.UU. se opone a plan de la ONU para reducir emisiones de gases en el transporte marítimo

Washington, 12 ago (EFE).- Estados Unidos se opone al plan de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para intentar reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en el transporte marítimo, según informó la Administración Trump en un comunicado publicado este martes.

De acuerdo con el documento, el marco legal del acuerdo —alcanzado entre los departamentos de Estado, Comercio, Energía y Transportes, "jurídicamente vinculante" y elaborado por el organismo especializado de la ONU y la Organización Marítima Internacional (OMI) para alcanzar cero emisiones en 2050— va en contra de los consumidores estadounidenses.

"El presidente Trump ha dejado claro que Estados Unidos no aceptará ningún acuerdo medioambiental internacional que suponga una carga indebida o injusta para EE.UU. o que perjudique los intereses del pueblo estadounidense", recoge el comunicado.

Críticas al Marco Net-Zero

Según la argumentación, este 'Marco Net-Zero', como bautizó la OMI a su plan, funcionaría como un "impuesto global al carbono" y beneficiará a China.

"Lucharemos con firmeza para proteger al pueblo estadounidense y sus intereses económicos", dice el mensaje, tras adelantar que buscarán apoyos internacionales para frenar esta medida y que están dispuestos a "tomar represalias".

Una estrategia global contra el cambio climático

El marco, que la ONU afirma será el primero en el mundo de este tipo, es de carácter obligatorio para los grandes buques oceánicos de más de 5.000 toneladas, que emiten el 85 % del total de las emisiones de CO2 del transporte marítimo internacional.

Trump no ha apoyado muchas medidas que buscan mitigar los efectos del cambio climático; es el caso de la salida de EE.UU. del Acuerdo de París, la anulación de varias normativas medioambientales, la promoción de los combustibles fósiles y el poco impulso a las energías limpias.

El transporte marítimo internacional representa aproximadamente el 3 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI), razón por la cual la Organización Marítima Internacional (OMI), en coordinación con la ONU, ha impulsado iniciativas para reducir su impacto ambiental. En este contexto, varios países han mostrado su apoyo a establecer un marco regulatorio vinculante para alcanzar emisiones netas cero en 2050, aunque no sin enfrentar resistencia, especialmente por parte de gobiernos como el de Estados Unidos, que han priorizado sus intereses económicos frente a compromisos climáticos internacionales.